domingo, 5 de abril de 2020

LA CHULERÍA DE LA POLÍTICA ESPAÑOLA

Llevamos unos días encerrados en casa por una medida tomada a tiempo según los expertos, y mal tomada según una parte del panorama político español, que no bastante tienen con aclararse en como  organizarse, que tienen tiempo para intentar arreglar una situación que nadie ha vivido y que parece que ellos agarrados a sus ancestrales pasados, sabían cómo iba a venir la cosa. 

Suficiente parece merece un aclarado. Todo lo que yo diga aquí son opiniones personales, que nadie se crea que yo tengo una lámpara mágica que froto y sale lo que yo quiero. 

Por mucho que se empeñen los susodichos, en este país y con el recuerdo que nos viene a la cabeza de anteriores crisis, lo más normal es que la izquierda lo haga mal, y en las próximas elecciones gane la derecha y vuelva imponer políticas neoliberales, entregados a los poderes, que según sus ideologías, son los únicos que saben generar riqueza, a costa de bajar impuestos, y creando empleo. 

Esa forma de bajar impuestos muy curiosa, porque cuando gobierna la derecha los ricos son más ricos y los pobres... somos más pobres porque lo hemos elegido, según su ideario canalizado con una forma sencilla de vender eso, que es que si quieres ser rico copia a los ricos, pero cuidaros de no engañaros que no os vamos a ayudar. 

Como bien se viene observando a la derecha le da lo mismo el coronavirus, que la iglesia no haga nada por este virus, que el rey no aparezca en ningún sitio, que se destape el mayor escándalo de una monarquia en todo el mundo, que las residencias de ancianos estén teniendo dejar morir a los mayores por falta de medios porque han sido privatizadas y entregadas a sus amigotes, que los hospitales privados y centros  privados manden a sus trabajadoras y trabajadores a sus casas porque no pueden pagarles los salarios, que las ayudas hayan de seguir un curso difícil por falta de infraestructura en la administración por los recortes de Rajoy y la falta de personal y medios para digitalizarla. 

Todo eso para la derecha no es importante porque según ellos quién manda debe ondear banderas a media asta en los ayuntamientos, debe imponer su propia ideología según convenga en su ciudad, debe arremeter contra todo lo que la fuerza del poder no haga a golpe de decreto irracional. Poniendo los tanques en la calle con los ejércitos ametrallando a todo el que se mueva más de dos metros de su ideología. 

Porque a ellos lo único que les mueve es su ideología, su amor por la bandera, la pulsera, la demagogia, la irresponsabilidad contaminando la redes sociales y los argumentarios de la prensa pagada a golpe de talonario para que su epopeya se vea reflejada dia tras día en los máximos hilos posibles de la comunicación actual.

Esto se ve a un simple golpe de clic en cualquier red social de las muchas que manejamos con facilidad l mayoría de personas. 

Ante esta avalancha de barbaridades, es fácil pensar para muchos que seguramente algo de razón tendrán. Para otros, pueden pensar que tienen toda la razón porque el gobierno dónde esté podemos es catastrófico. Para otros no tiene ningún sentido ver que la derecha siempre que no manda, levanta el grito de la forma que sea, implantando un discurso basado en la difamación, en una sobradez de populismo absurdo y maloliente que genera una animadversión en los de enfrente que sienta fatal. 

Pero la única verdad de esta crisis es, y como punto final a mi opinión, es que los más perjudicados en esta crisis siempre somos los mismos. Los que la padecemos. Los que han perdido su familiar y no le han podido despedir. Los que han cerrado su negocio y no saben si lo van a poder abrir. Los que abrirán habiendo tenido que solicitar créditos para pagar nóminas y no van a poder soportar la presión. 

Porque cuantos suicidios, cuantos enfermos por depresión van a llegar después de esta gran pandemia vamos a tener que contar y que a lo mejor son más que los que mueran por el coronavirus, pero no interesa que se sepa, porque serán consecuencia de su pésima gestión de las necesidades de su país, ESPAÑA

lunes, 3 de diciembre de 2018

FLACO FAVOR DEL PSOE A LOS ANDALUCES.

Bueno pues hoy es un dia normal. Luness. Un comienzo de semana como otro cualquiera, con la salvedad de que han pasado cosas. Y ciertas cosas que no hay que dejar pasar de largo para que a nadie le suene raro lo que viene en las próximas semanas, meses e incluso años si no se pone solución al problema español.

Esta muy bien que la gente vote a quien le de la gana, con todo lo que conlleva, pero no es de recibo que se quiera criminalizar a quien vota a ciertos partidos solo por no ver tus propios errores.

Desde anoche en el PSOE por ser el principal perjudicado de las votaciones andaluzas, tiene que ver que la culpa, la principal culpa y la única culpa del sangrado electoral que ha sufrido en estas elecciones ha sido por que no se puede entregar al partido mas moderado de la extrema derecha española, llamado Ciudadanos. No lo debía haber hecho en su momento porque no es de recibo que un partido que antaño era de izquierdas, ahora se entregue a  la minima a la derecha para que la parte mas a la izquierda que es PODEMOS, no le gane terreno. Pues mira, ahora quien se lo ha ganado han sido los mismos que ella decía que eran unos buenos socios de gobierno para no dejar entrar al mal llamado "populismo" de izquierdas que según ella practicaba PODEMOS.

No se puede tolerar tratar de enviar un mensaje al electorado andaluz, todo esto en mi modesta opinión, sin ser andaluz y sin haber seguido el trayecto de Susana Diaz y sus secuaces, de querer banalizar sus políticas cuando están han sido sostenidas nada mas y nada menos que por la extrema derecha vestida de progresos que son inaceptables para los grandes progesistas de nuestro país. Entregarse a este partido diciendo lo mismo de siempre, no le ha servido mas que para hundirse en la miseria de no querer verse el ombligo lleno de mierda, por no ser capaz de expulsar de la política a toda la gente mafiosa que ha delinquido con las siglas del PSOE en todo los rincones de la sociedad andaluza. Pues ahora a recoger la mierda que te van a dejar, tus amigos de CIUDADANOS.

Asi que no vendáis lo que no es porque al final se pilla antes a un mentiroso que a un cojo. Los pactos del PSOE con la extrema derecha ha sido lo que ha conducido a  la gente q no fiarse de Susan Diaz y sus promesas, que han preferido quedarse en casa sin votar que salir a la calle a parar las barbaridades que nos vienen encima con la extrema derecha dentro de todas las instituciones como vamos  a ver en las próximas elecciones tanto locales como generales, y autonómicas.

Espero que se termine de llamar de IZQUIERDAS a un partido que le ha faltado el respeto a tantos españoles durante tanto tiempo, por sus prolongados pactos de no agresión contra el PP en los últimos años y con CIUDADANOS en las administraciones andaluzas.

SALUD Y REPUBLICA!!!
 

lunes, 1 de octubre de 2018

Políticos de pulsera. Ciudadanos ignorantes

Hace muchos meses que no escribo nada en mi blog. He pasado de puntillas por estos meses y la verdad, que me siento con ganas de expresar mi opinión sobre lo que esta ocurriendo en este malvado país en que lo han convertido los extremistas, y mas los de derechas que los de izquierdas.

A veces uno tiene la sensacional percepción de que esta pasando el tiempo sin ser capaz de decidirse por donde reflejar sus pensamientos. A muchos les invade la duda de que todos son iguales, de que todos llegan a la política para lo mismo, enriquecerse y ser voces autorizadas para intentar convencer a una parte muy grande de la sociedad de que solo sus ideales y su promesas son las que les darán a muchos ciudadanos las formas correctas y placenteras de vivir por el resto de sus días.

A muchos les ayuda bien poco esta percepción de la política de adulterar la realidad, soltando blasfemias de todo tipo, conservando las formas en sus trajes y en sus vestimentas, pero perdiéndolas en sus profecías sobre la necesidad de convertir la política, en un patio de colegio, donde el que mas grande dice la idiotez, mas fortalecido sale. Y eso tiene un peso en el mecanismo periodístico de hoy en día, que vende mucho mas que lo que tenia que vender, que es en teoría para lo que se llega a la política. O eso debería ser.

No pocas veces, estos políticos, por no decir la mayoría, son voceros de propuestas que ni ellos mismos conocen, porque no han sido capaces ni de desgranar el final del mensaje en cuestión, porque suelen vivir entre una red de asesores de imagen, de apariencia, de perfil estilizada y elitista, estando a años luz de la apariencia que quieren dar. A los hechos me remito, que parece que les importa mas tener un currículum lleno de títulos, que tener el mas importante, que es el de la decencia.

Ante todo este maremagnum de hostilidad es para convencer a la sociedad de quien es el mejor político para conducir a la masa borreguera, queda dicho y retratado aquel que intenta desde la mas bajas esferas políticas, como son los que no quieren vender su imagen de buenos y formales, que son los mas maltratados por parte de la esfera periodística española, que es la mas ingrata maquinaria electoral manipuladora que existe en este país, junto con los poderes lácticos y económicos.

Es como quien te quiere vender un Ferrari o una bicicleta. El Ferrari te lo visten por fuera, por dentro, por los lados, por arriba y por abajo. Va solo, porque tiene el mejor equipo detrás para poder ser el mejor producto. En cambio la bicicleta es un producto que si no le das tu a los pedales, por muy bonito que sea, no va. Pues ahí es donde el ciudadano español debería hacer hincapié para que no le vendieran la moto de quien es el mejor para dirigir el rumbo de nuestro país.

Pero como al español medio, le importa una mierda la realidad, y le importa mas la imagen, llegamos al punto de satisfacernos y de que manera, viendo al tío de traje y guapo que sale en la televisión contándonos que los catalanes son unos separatistas de mierda y que los de "a por ellos" son los únicos que tienen razón. Cuando si fuésemos sensatos con nosotros mismos, nos partiríamos el alma para conocer a fondo cada político y cada programa electoral para desgranar hasta el ultimo grano de la condición que nos venden pero que realmente no sirve, porque no hacemos lo que tenemos que hacer.

Ahí es donde podríamos reivindicar nuestra lealtad a quien fuera, solamente con dedicar una parte ínfima de nuestra labor diaria para intentar que no nos vendan a voz lo que después no saben plasmar en papel y que sea de obligación cumplimentaria, para entonces si poder decir que quien nos representa se comporta como nos merecemos, y quien no lo haga sera castigado para todos los tiempos de los tiempos. Sin amen.


viernes, 6 de abril de 2018

Cerrar la boca. Taparse la nariz. Hacerse el ciego.

Como siempre se dice, los tontos, nunca están tontos del todo. Después están los que se lo quieren hacer. También están los que les interesa hacérselo. Los que lo intentan y no lo consiguen. Los que lo son y no quieren serlo. Todos siempre tendrán a lo largo de su vida, un momento de lucidez. Pura estadística.

Como siempre pasa, después tenemos la suerte hoy en día de poder elegir de dónde coger la información, de dónde podemos escoger o recoger la parte que más real nos parezca, la parte que más afinidad nos enfatice, por ideología, por que sean más veraces o por lo que sea. También está la parte sentimental, mediática, atractiva, que nos cree lo contrario, es decir, ninguna afinidad, ningún motivo para acercarnos a esos medios que nos puedan decir lo que ellos quieran que interpretemos de una noticia cual sea.

Ante todo este juego de palabras, tenemos una parte de culpa de todos los males, la sociedad. Nos gusta mucho encender la televisión, la radio y escuchar los programas de toda la vida, las emisoras de siempre, leer los periódicos de siempre. No es una mala opción, la verdad. Pero tenemos que ser más burros, ya no con los medios informativos, sino con nosotros mismos.

No podemos o debemos quejarnos de lo mal que lo hacen unos u otros sin saber la verdad, o lo más cercano a la realidad sin contrastar esa información que nos meten con maza y escarpe a todo tren, en la cabeza. Nos repiten una y mil veces una noticia, hasta que nos la creemos, sin tener la certeza de que sea una verdad entera, a medias, o una mentira con las patas cortas. Nos está pasando ahora mismo con varios temas de actualidad.

Es muy gracioso, a la vez que triste, escuchar a un amigo, familiar o conocido, decirte cuando le hablas de la independencia de Cataluña, por ejemplo, que no me fío de nadie, porque en todos los sitios se cuecen habas. Nadie dice que no. Pero porque no intentas ser objetivo, perdiendo un poco de tiempo, recopilando información de diferentes medios, en vez de escuchar solamente, lo tradicional.

También es muy fácil decirlo, y luego hacer lo que todos hacen. Pregonar que solo lo que dice el que manda es lo correcto. Que los demás lo que quieren es gobernar, pero como no han sido capaces de conseguirlo en unas votaciones, lo quieren hacer a través de la prensa. Pero que prensa, si está Rosa acorazada al poder del gobierno, que para eso les financia. O es que tu, serías capaz de echar mierda sobre la mano que te da de comer.

O es que te puedes creer que las ayudas en los presupuestos a los medios informativos, son gratis. O lo típico. Es que esta en los presupuestos, obligados por la Constitución y porque sean equiparados todos en el derecho a la información, plural,y libre. Y una mierda.

Está muy claro que los medios tradicionales, son los medios del poder, manipulados, a cambio de darles ayudas para subsistir, se convierten en los megáfonos de los partidos políticos, para que sean ellos los que se dediquen a incrustar en las mentes menos dispuestas a buscar la verdad, las boticas que a los poderes les interesan que tengamos presentes. Todo eso, para que dejemos de pensar y que sólo veamos que lo único bueno es lo que nos cuentan los medios del poder.

Para finalizar solo queda una única opción. Que es la que ellos quieren.

Cerrar la boca.
Taparse la nariz.
Hacerse el ciego.

miércoles, 21 de febrero de 2018

QUE NO SE AVERGÜENCEN NUESTROS HIJOS, DE SUS PADRES, POR FAVOR

La indiferencia creada desde las altas esferas políticas y la desafeccion hacia los problemas crea en la gente el suficiente desapego para no considerar importante ni necesario ser parte de la solución de los problemas. Todo este pensamiento viene dado desde que vemos a muchos artistas salir en los medios de difusión cantando, hablando y actuando contra el totalitarismo que nos cubre la cabeza y nos desespera el alma,  pero del cual no somos capaces de separarnos.

Esta maquinaria que utiliza el poder para magnificar el "a por ellos", contra gente normal, que si pisa las calles, y si que vive la realidad, en contrapartida de los políticos que la mayoría viven en su nube, da a exponer el siguiente pensamiento.

No será que nos estamos dejando arrastrar hacía la ignorancia supeditada al pensamiento de que todos son iguales y que da lo mismo a quien votes?

No será que preferimos ver en la TV a la Marta Sánchez de turno, con todo el respeto que se merece su trayectoria musical, pero no debería ser noticia por lo que ha sido y si por sus supuestos escondites de pago a hacienda que tiene su corta vida fuera de España.

No será que preferimos un sálvame a diario de periodistas y pseudo periodistas que supuestamente cobraran de los partidos de turno para que les mantengan las cuotas de creyentes en los valores que ellos quieren para hacer creer que son los mas adecuados gestores de nuestros impuestos?

No será que nos gusta mas que nos intoxiquen con banderas, himnos, y demás pantomimas que solo esconden detrás la mas burda y pura distracción de la realidad palpable que se vive en las calles, pero que no todos queremos ver porque pensamos que no es para tanto?

No será que nos importa mas que nos mantengan entretenido con las idas y venidas de famosos que exhiben la banderita en la muñeca pero después no pisan España mas que para enterrar a sus familiares? Con lo cual tampoco pagan los impuestos en nuestro país,  como todos los demás, los que si vivimos aquí y sufrimos la realidad del día a día.

No será que no nos importa de verdad las barbaridades que estamos sufriendo por votar con la boca llena y los ojos apretados y la nariz tapada. Porque mientras tenemos la boca llena, no miramos lo que nos están haciendo,  y no respiramos la mierda que nos están haciendo porque la comida nos disimula muy bien el olor a putrefacto de un sistema político que viene de las entrañas del franquismo, aunque parece que no nos guste.

Pues todo lo que he expuesto anteriormente es para mi, bajo mi punto de vista, un corto reflejo del pensamiento que me lleva a pensar que para el español de a pie, le vasta con no ver, ni oir, ni pensar mas alla de lo que nos dicen en la TV, porque para eso se necesita un auto examen de conciencia que por lo visto no estamos dispuestos a ejercer, porque seguimos confiando ciegamente en la gentuza de turno que con buenas palabras, con buenos trajes, con buenas formas, alimentan nuestro querido sentimiento, pero que al mismo tiempo nos arruina. Ya no nuestro presente, sino el futuro de las generaciones que vienen por detrás, que la verdad sea dicha, nos maldeciran, sentirán vergüenza y nos harán pitar los oídos aunque solo queden en nuestros ataúdes mas que los huesos.

Sino ya lo veréis.

viernes, 12 de enero de 2018

CÓMO PODEMOS PERMITIR QUE NOS GOBIERNE GENTUZA

De hace un tiempo para aquí, vamos viendo que el actual sistema de elección de nuestros representantes es algo así como..... un poco obsoleto. Algo así como un capítulo negro de nuestro patriarcado político, de nuestro sector de vividores que sin ton ni son se te meten en primera línea de la vida política española. Son gente que le gusta ser mirada por todos, en todas partes, y durante el tiempo que haga falta, para vivir de una forma exquisita, precisamente sin ser exquisitos en, prácticamente, nada. No sienten vergüenza, ni reparo en hacer el ridículo, en caer en desgracia, en ser gestores ridículos de los recursos que generan los impuestos, en llenar portadas con su pésima imagen de una administración pública, de un partido político, de una organización cualquiera que sea.

En España tenemos la virtud de celebrar cuando un partido político gana unas elecciones, como si con esto fuese sujeto a gusto de los representantes que forman la lista, de vitorear, aplaudir, incluso ignorar que detrás de ese traje, de ese nombre, de ese personaje, se esconde un tipo que mientras tú le vas a votar o ya le has votado, se este frotando la manos pensando que su vida cambia en el momento que tú dejas la papeleta a su favor. Es capaz de dilapidar tu ilusión, tú gratitud dándole la posibilidad de que te represente, a cualquier poder que se le cruce por delante, con tal de no dejar de satisfacer a esos estimados agradecidos del poder y contando con el beneplácito de que tu voto no vale más que para que el siga poniéndose trajes y corbatas para aparentar.

Amén de todo esto redactado antes, hay que contar que para ser maestro, juez, profesor, investigador, médico, fontanero, albañil, fisioterapeuta, masajista, decorador, o cualquier oficio titulado, se necesita aparte de sus estudios correspondientes, el agrado de una buena parte de la gente que te cruzas en el camino de tu vida, porque sino te mueres de hambre. Bueno pues, en la política, nada de nada. Basta con apuntarte a las juventudes de un partido cualquiera y solo arrastrándose por las entrañas de tal organización, seguramente llegarás a los lugares más altos que cualquier profesión te pueda otorgar con el paso de los años.

Y no bastante con esto, de sobra queda dicho que la parte más chocante de este caso es que para ser ministro de un país como España basta haber sido el peor alcalde que haya pasado por los siglos de los siglos. No es lo normal en un país digno, democrático y decente. Es lo normal en, España.

Para cambiar esto solo se necesita una cosa. Cojones. Eso que se sacan de la manga muchos españoles cuando les arrean con banderas patriotas a defender su país, al mismo tiempo que por detrás están pensando lo ignorantes que son "nuestros votantes" que aún robándoles a manos llenas, cuando los alentamos un poco, nos defienden. Si si, esos del "a por ellos, oe", tan patriotas que se ven y no son capaces de ver que están dejando su España, bueno la de todos, con los calzoncillos y las bragas cagadas, o más bien agujereadas de tanto darnos por el trasero. Esa España que cuando el día de mañana nuestros hijos sean de nuestra edad no reconocerán, ni por los sueños más imposibles de creer, ni por la madre que nos parió.

En fin, que para poder hablar de una España diferente, lo primero y necesario, es vernos al espejo cada uno para así saber que detrás de cada rayo de luz que disparemos de nuestros ojos, una oportunidad se está perdiendo. Ya no de cambiar este país por otro, sino de cambiar el pensamiento de una España moderna, por una España avanzada, con buenas dosis de democracia y con una buena forma de elegir a nuestros representantes.

Salud y República

miércoles, 6 de diciembre de 2017

MENTE SECUESTRADA, POBLACIÓN INSENSATA

Estamos mucho tiempo esperando que alguien consiga cambiar el pensar de una parte de la población española. Que venga un Mesías que nos devuelva todo lo robado. Que nos devuelva nuestra dignidad. Que nos enseñe una forma diferente de pensar respecto a la inmigración, hacia los dependientes, hacia la pobreza, hacia la regeneración política, hacia una salud que nos cure de verdad y que no nos hinche a fármacos que no conducen a nada nuevo. Recetas de economistas con una cantidad de componentes que ni ellos mismos son capaces de repetir en dos exposiciones con una espacio de tiempo corto entre ambas.

Estamos ante una disyuntiva que nos está obligando a tomar posición en el sentido más impropio de una cultura basada en la auto destrucción, en la que no nos satisface ser felices por convicción propia, porque nos imaginamos que ser libres de pensamiento, nos obliga a tener que aceptar el fracaso, en el caso de que se produzca. Que no tiene porqué. Más que nada porque el que no arriesga no gana. Más que nada que porque el que se siente libre de pensamiento se le llama anti sistema, se le llama anticonstitucionalista, se le llama anti patriota, y eso en la sociedad en la que vivimos tiene un mal compañero de viaje.

Ese mal tiene una definición muy pobre de lo que debería ser un humano con la capacidad de decisión de sus convicciones, no de la de los demás. Esa no implicación en la decisión propia de un pensamiento, se obtiene por culpa del secuestro de ideología que nos hacen los políticos de hoy en día. Que más que hacer política se dedican a secuestrar el pensamiento libre de muchos ciudadanos, cautivados por el miedo que genera la inestabilidad causada por la incertidumbre ante lo desconocido. Y ese problema se degenera cuando el político de turno observa alguna alteración que pueda conducir a los individuos a hacer un intento de limpiar su mentalidad de pensamientos distintos. Pensamientos que puedan abrir la mente y puedan llevar a pensar que lo que le cuentan puede tener otro punto de vista muy diferente. Con lo que el político embaucador siente que el miedo cambie de lado y se le vuelva en contra.

Otra forma de manipular la ideología, debería ser la convicción de que sus políticas son las mejores. Son las que más ayudan a todos por igual. Pero esta política se harían siempre que dichos políticos pudiesen partir en sus posiciones, con las manos limpias. Aunque tuviesen cierta ideología no muy acertada para la mayoría, que fuesen consecuentes y que se viesen arraigadas a sus seguidores. Pero esto no pasa, más que nada, porque cada vez está más claro que la mayoría de estos políticos del siglo que vivimos, están más preocupados por ser famosos y por hacerse ricos, que por servir a los de abajo.

Bajo mi punto de vista, muy personal y con la crítica aceptada de antemano, veo muy difícil que la gente abra la mente para recapacitar sobre su elección cada vez que hay elecciones en nuestra querida patria, llamada España, pero que cualquier día perderá hasta el nombre como sigan mandando este tipo de gentuza que se llena los bolsillos de dinero público y que cuando ya los tienen llenos, se dedican a venderlo al mejor postor para que les sigan llenando los bolsillos, no sea que con lo robado no les de para vivir como ricos, pero sin haberlo ganado.

Y no los veo preparados, a lo mejor yo el primero, porque vivimos cautivados con el poder, vivimos arraigados a una forma de ver a los de traje, muy diferente de cómo deberíamos verlo. Sobre todo, porque la cuidada puesta en escena de esta gente, permitida por el miedo que nos han metido previamente, nos inhibe de pensar, de ver, de reaccionar, de manifestar, cualquier alegría que nuestra mente se pudiese dar, si en vez de verlos tan bien vestidos, los vieramos desnudos, o con la misma ropa que nosotros nos podemos comprar, gracias a la diferencia de clases que ellos se encargan de crear, para que ellos lleven traje y nos puedan mirar de forma diferente a nosotros que no llevamos traje.

La forma de hablar de esta gente, siempre asediando al pueblo, obligándole a creerse lo que ellos quieren que te creas, es una gran arma para destruir la mente abierta que debería prodigar un buen político. Porque esa mente preparada, vendría junto, con unas mejores reprobaciones, a situar el nivel de la actuaciones políticas, en el lugar donde toca, y no donde ellos quieren que se nos quede, que es en el lugar de destruir al oponente con falacias que solo llevan al enfrentamiento entre las gentes del pueblo y que no ayudan más que a engordar con mentiras, la falta de transparencia de las políticas destructivas.

Y para esto crean la corrupción, se aprovechan del poder del dinero en el que todos vivimos sumergidos, comprando todos los medios informativos posibles para así asegurarse que a las mente de las personas les llegue el artefacto que han preparado de la mejor forma creada para que sea capaz de destruir cualquier atisbo de cambio mental que conduzca a teñir de una lucidez que les destrone y les destroce sus fines políticos.

Con las armas de destrucción psicológica se llevan la palma, aunque a veces dudo de que sean realmente conscientes de esa capacidad que tienen, porque estos políticos destructores de sociedades humanas que deberían ser libres de pensamiento, no se les puede atribuir mucha lucidez más que la que les manden sus superiores.

Para luchar contra esa lacra política solo cabe...
Despertar, despertar y despertar.
Luchar, luchar y luchar.
Educar, educar y educar.

Salud y República.