lunes, 2 de octubre de 2017

La falta de cordura de la clase política

En estos días previos a que llegase el día señalado como un antes y un después de España, uno siente la necesidad de armarse de cordura, de sentido común, y sobre todo, de realidad. De pensar a donde nos lleva esta tumultuosa forma de hacer política, este dejadez de sentido común, esta salvaje dejación de obligaciones sobre la ciudadanía que contraen los gobernantes que se llenan la boca de palabras, de frases que solo hacen que arrancar un titular acorde con poco mas que su idea de votantes que no se pueden dejar por el camino en las próximas elecciones.

Se les ha hecho largo a todos. O pesado. O aburrido. O exagerado. Pero sobre todo lo que se le ha hecho a una mayoría de españoles es, insoportable. Ver todos los días durante semanas las infumables barbaridades que dicen y que escriben sobre la realidad d este problema, es una forma de distracción. Una forma de dejar de hacer para lo que realmente están ahí. Para hacer POLÍTICA. Han sido capaces de dejar de ocuparse de la mayoría de responsabilidades, solamente pensando en el rédito que les podía dejar una polarización del debate nacional, entre un bando y otro, con la conformidad de la población abducida y necesita de creencias inservibles mas que para que sus pregoneros no pierdan ni un voto por el camino, o que apelando a frases más típicas de otros escenarios, fuesen capaces de concentrar a esa parte de la población que se siente identificada con las agresiones como defensa, en vez de apretar ideas a desbloquear el problema de sus políticos.

Estos que se creen que con las banderas se ganan las batallas no se pueden sentir orgullosos de defenderse bajo un trozo de tela, que es lo que pretenden sus voceros. Porque mientras les dan a los colores, no reciben los olores d una poderosa arma que es a la cual mas miedo tienen los exaltadores de la realidad, que es la sabiduría de su pueblo. Y esa sabiduría, radica, en la necesidad de quitarse la bandera que los atrinchera, y pensar, que todos los colores son igual de radicales, pero que las necesidades no conocen, ni banderas, ni colores. Que hoy me están tocando a mi la fibra con los colores y mañana te están robando a ti la dignidad. Esa cosa que cuesta mucho mantener, después de haber sudado para conseguir, y que por un trozo de tela y unos colores detrás de los cuales nos ven escondernos los políticos, están un montón de necesidades, de robos, que sino somos capaces de defender entre nosotros, estamos perdidos. Perdidos en la miseria de la cual el único beneficio no es para nosotros, es para ellos.

Esos beneficios son lo mas ridículo por lo cual un pueblo debe sentirse agraciado. Porque seria mucho mas beneficioso será capaces de quitarnos la máscara, esa que nos hace ver solo lo que los colores q decimos nos representan, nos dejan ver y hace un poco de auto suficiencia para poder asistir a un cambio que nos permita valorar mas a los políticos por lo que nos hacen, tanto bien como mal, en vez de por el color de la bandera que defienden. Asegurado queda que nos iría mucho mejor y conseguiríamos estar mas unidos que lo que los políticos han sido capaces de conseguir.

Aunque para eso hay que hacer mucha autócritica y reflexionar si realmente tenemos tantas cosas diferentes entre todos los españoles. Cuesta creer que sea verdad. Porque la diversidad del estado español, es tan rica en su variedad que de todas partes se extrae una gran finalidad. Que es el amor entre sus tierras. Cosa que la política no puede separar, por radicalismos de ciertos personajes que estando de paso por la política, no debemos ser capaces de dejarlos hacer el daño que están haciendo. Y eso se consigue no perdiendo la cabeza detrás de una bandera y detrás de unas políticas que quedan aprobadas bajo una bandera. La de la penitencia hacia los desastres generados por los mayores defraudadores de la ciudadanía. Los corruptos. Solo ellos son los beneficiados escudándose en la mentira que de la tiranía de una parte d España han creado, como soi de un mito se hablase, para que no se hable de sus terribles políticas, que solo están generando odio entre las diferentes tierras de nuestro país, para así esconder a la ciudadanía la realidad de su gobernabilidad.