Hace unos años que cuando llegan estas fechas las calles se llenan de gente devota de unas imágenes representativas de los pasajes de Jesús durante la vida supuesta que vivió este hombre, y que nos cuentan en un libro llamado Biblia. Digo esto porque yo sigo teniendo serías dudas de que realmente existiese este libro hace tanto tiempo como dicen. Es mi modesta opinión.
Hace unos años se ocultaba todo lo demás detrás de estos días, se paraba el país, se paraba la vida diaria, se paraba todo para venerar estás imágenes de madera. Me refiero a la época franquista. Ahora se para poco de la vida, se para poco del trabajo, se para poco en general.
Pero lo que no se para y va en aumento es la poca decencia y el poco respeto que se tiene a los q realmente somos laicos y aconfesionales. Nos llenan las TV, nos llenan las calles, nos llenan todos los medios posibles de trozos de madera, eso si muy bien arreglados y muy currados, que de eso no hay duda, para glorificar una cuestión q sigue siendo a día de hoy el escaparate perfecto para ocultar las realidades de una población en estado de shock por las penurias que nos hacen pasar los recortes presupuestarios de una doctrina neoliberal, que ahora ya ni se esconde para demostrar a puertas abiertas su pensamiento, su adicción y su enfervorizacion hacia esta ideología católica.
Nos siguen metiendo como un juego la palabra acofensional en nuestra constitución, nos la siguen recitando todas las esferas políticas de la era franquista que siguen gobernando en una población ninguneada, como si de un caramelo fuese, para que no les encaremos de cara y los pongamos cara a la pared o colgados de una cruz como ellos dicen que murió un tal Jesús.
La gente necesitada de una fé, de una creencia religiosa, indigna de la época en la que vivimos, se aferra aún a sabiendas que todo lo que les cuenten solo se lo creen unos cuantos, pero sirve a las esferas políticas, para atrapar en ese sueño eterno a la maltratada población, desgarrada por la doctrina del shock, y maltrecha por la usurpación de lo único que de verdad les tenía q atrapar, y que es la verdad que no les cuentan estos, que es que lo poco que tenían se lo robaron para repartirlo entre ellos.
No debería indignar que les digan a esta gente q venera imágenes que creer en eso está muy bien, pero que vayan con cuidado que la iglesia va "con el mazo dando y a su espalda robando", un dicho que no hay más que ver, que para que la iglesia siga viviendo tan bien como viven, a alguien se lo tiene que quitar,y no es a otro que al que le venera a cambio de nada, y de solo una creencia que no tiene ni pies ni cabeza, no se puede vivir, pq ese Jesús del que hablan, aún no ha resucitado y ya pueden esperar sentados, que no va a volver. No les debería molestar.
Que para vivir mejor que los curas simplemente habría q decirles que menos rezar y más currar, que los impuestos solo los paganos los de la tierra, los que la pisamos, los que la trabajamos y los que de ella comemos con nuestro esfuerzo día a día.
Que para que ellos vivan así, un estado político basado en el miedo y en una creencia falsa les deja campar a sus anchas por las instituciones, les deja participar en las decisiones más importantes, como esa sobretodo en la educación, que es el arma que ellos adoptan, los políticos, ayudados por la iglesia, para q nadie se salga de la cremallera que ellos tienen para asignar a la clase obrera, a los de la calle, una doctrina basada en la creencia de lo increíble, basada en la seguridad de que alguien de carne y hueso resucitará para salvarnos de lo peor.
Pero que es lo peor? Lo peor no es lo que nos hacen vivir estos creyentes de pacotilla, los políticos, que nos aseguran pan y vino para todos, y solo nos dan agua pagada y migas de pan, para q no desfallezcas en tu humilde propósito de creer que todo llegará y de seguir pagando tus impuestos?
No les parece suficiente a los que los veneran, tener que malvivir todos a cambio de una obviedad que nos esconden detrás del manto sagrado, que según ellos dicen, fue con lo que se limpio la sangre el divino Jesús. Repito, de carne y hueso, como todos.
Nos debería avergonzar al igual pensar en lo que pensamos, el dejarnos distraer de las necesidades, escondidos detrás de una forma de ver la vida que nadie ha demostrado que mejore la de todos.
En fin como quien no quiere la cosa, llévanos aguantando las miserias de esta gentuza, iglesia y derecha política que manda de la sociedad muchos años. Hasta que el cuerpo aguante, o hasta que la gente despierte...
Saluda y República.
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